¿Conoces cómo proteger la pintura de tu vehículo? (Parte 2)

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En el post anterior comentamos diferentes formas de cuidar la carrocería de nuestro vehículo utilizando productos sobre ella, en el post de hoy trataremos otra forma de proteger nuestra pintura e incluso darle un lavado de cara si estamos cansados de su estética.

Otra de las opciones que existe para proteger la pintura es la de vinilar el vehículo, también conocido como wrap o wraping, de este modo protegemos la pintura original, evitando chinazos, rascadas… Podemos elegir diferentes opciones: Mantener el mismo color, cambiar de color o utilizar uno transparente. Incluso existen algunos vinilos que al mojarlos cambian de color o muestran un diseño oculto.

Cabe destacar que este proceso no oculta desperfectos, incluso en función del color escogido los agrava más. Debemos tener una carrocería en buen estado, para que el vinilo quede como si fuese la pintura de origen.

Vehículo en proceso de vinilar

Si estamos cansados del color original del vehículo, el límite lo pone la imaginación y bolsillo.

Se realizan diseños extravagantes, donde se busca exclusividad y que no pase desapercibido.

A la izquierda un Lamborghini a la derecha un Bmw con diseños fuera de lo común.

Si no queremos alterar el apartado estético y únicamente queremos proteger nuestra pintura podemos optar por el vinilo transparente denominado PPF (Paint Protection Film). Este vinilo es algo diferente frente al clásico de un color, o con diseño.

Es capaz de proteger nuestra pintura de chinazos, arañazos y pequeños impactos. El vinilo está compuesto de poliuretano termoplástico, con un acabado más grueso que ofrece mayor duración, normalmente ofrecen una garantía de 5 a 10 años, incluso algunos fabricantes de por vida.

Como hemos comentado antes, con este material las imperfecciones son más visibles, así que sería conveniente tener la carrocería en un muy buen estado. Sus principales características son: Es un material liviano, es transparente y ofrece mayor brillo a la pintura. Ofrece una alta resistencia a impactos, abrasión y corrosión. Es un material muy flexible, capaz de estirarse y cubrir cualquier superficie. Tiene capacidad autoregenerativa, de forma que los arañazos leves desaparecen rápidamente.

En esta imagen se muestran las diferentes capas del PPF

No todo iba a ser bueno, uno de sus principales inconvenientes es su elevado precio, se suele utilizar en vehículos de alta gama. Cabe destacar que actualmente es el proceso más completo a la hora de proteger un vehículo. Suelen ofrecer diferentes opciones a la hora de instalarlo. El más demandado es el “front cut” consta de proteger la parte delantera del vehículo. El front cut protege: aletas, paragolpes, capo e incluso los retrovisores ya que son las zonas más propensas a sufrir algún golpe.

En esta imagen podemos ver que partes protegería un front cut

Author: Buscador de Talleres

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