El repostaje de gas natural comprimido es sencillo, está exento de peligro y es rápido como el del resto de combustibles. Las medidas de seguridad adoptadas son las mismas que para el repostaje de gasolina o diésel
La presión estándar en los depósitos es de 200 bar a una temperatura de 15 °C. Para evitar que la presión en frío descienda de los 200 bar, la presión de repostaje variará entre 210 y 250 bares.
La boca de llenado incorpora una válvula de retención con filtro. La válvula de retención impide la fuga del GNC en sentido contrario durante la operación de repostado de gas y el filtro retiene las impurezas más gruesas que pueden estar contenidas en el gas natural. Al retirar la manguera de llenado, la descarga de una pequeña presión residual limpia el filtro. De esta forma el filtro no requiere mantenimiento.
Algunas estaciones de servicio GNC disponen de barreras o puertas de seguridad que solo pueden abrirse introduciendo una tarjeta de crédito en una ranura. Esto se realiza como medida de seguridad.
Las mangueras del surtidor tienen un boquerel que debe fijarse herméticamente a la toma de carga del vehículo. A diferencia del GLP, en este gas no es necesario utilizar adaptadores, ya que el sistema está estandarizado.
Para realizar la estanqueidad y mantener fijado el boquerel con la toma de carga, la manguera puede ser de tipo pistola o de palanca. Para iniciar el suministro de gas en el depósito, debe pulsarse un botón ubicado en el propio surtidor. Por otro lado puede detenerse el suministro si se pulsa el botón de parada.
El repostaje finaliza cuando el surtidor no puede introducir más gas en el depósito y aparece un mensaje en la pantalla del surtidor. Para retirar la manguera se debe girar la palanca 180° o liberar el seguro en las de tipo pistola.
A continuación se muestra un video de cómo realizar el repostaje de GNC en una estación de servicio Naturgy.
